Nuevo libro de la colección de Historia: «Sobre la fuga de ideas», de L. Binswanger

Miembro de una importante saga de psiquiatras, discípulo de Eugen Bleuler y Sigmund Freud y director del mítico Sanatorio Bellevue en Kreuzlingen (Suiza), Ludwig Binswanger (1881-1966) es conocido internacionalmente como fundador del análisis existencial (Daseinsanalyse). Pero su crucial aportación ha de entenderse sobre todo en el marco de un amplio movimiento de reforma —y, hasta cierto punto, refundación— de la psiquiatría y la psicología que, espoleado por la irrupción del psicoanálisis, la fenomenología y la antropología filosófica, se propuso superar las insuficiencias de la clínica tradicional de las enfermedades mentales y afrontar la problemática fundamental de la subjetividad en la comprensión de la locura y el sufrimiento psíquico.

Tras un ensayo sobre el sueño como escenario sustantivo en el que se imbrican la imaginación y la vida —célebre por la brillante introducción que Michel Foucault redactó para su edición francesa—, Binswanger consumó su personal apropiación de la ontología fundamental de Martin Heidegger en esta importante monografía dedicada a la “antropología existencial” de la manía. En ella, no interpretó el discurso saltígrado o inconexo de la fuga de ideas como un mero indicio de alteraciones subyacentes o como un tipo particular de trastorno del pensamiento, sino como la expresión de una transformación del conjunto de la estructura de la experiencia (manifiesta en el ámbito de la espacialidad, la temporalidad o la intersubjetividad) y, en definitiva, del “proyecto de mundo” en el que se desenvuelve la existencia maniaca.

Más allá del intento —ciertamente iluminador, pero también cuestionable— de revelar “posibilidades fácticas existentivas” a partir de categorías diagnósticas, la obra de Binswanger guarda lecciones de gran calado que la convierten en una fuente permanente de inspiración para la psicopatología: que detrás de cada síntoma palpita un sujeto —una totalidad organizada y abierta al mundo, a sí mismo y a los otros, y, por tanto, inmersa en el sentido— que no se consume en sus determinaciones biológicas o biográficas, que despliega su existencia en función de sus aspiraciones, retos, recursos, etc. y su horizonte cultural, y cuya conducta o experiencia solo pueden hacerse inteligibles a la vista de una individualidad que, como ya advirtió Hegel, no es sino “lo que es su mundo en cuanto mundo suyo”.

El libro puede adquirirse en la Tienda AEN a un precio de 25 €.

https://www.tienda-aen.es/producto/sobre-la-fuga-de-ideas/