– Las medidas anunciadas carecen de una evaluación solvente, de carácter estratégico, y ponen en peligro la calidad de la atención a los ciudadanos y las expectativas profesionales del conjunto de las profesiones sanitarias.
– Se rechaza la privatización del 10% de los centros de salud, la privatización de seis hospitales en gestión mixta y la reconversión de otros tres hospitales.